domingo, 23 de enero de 2011

LA MALA COSTUMBRE.

Haciendo "limpieza" del ordenador he tenido una agradable sorpresa. No recordaba que, para poner algún gadget en mi blog, pidieron que lo guardara por seguridad... Sinceramente, me extraña que lo hiciera pero... lo hice. Así que, casi un año después, he podido recuperar parte de mi antiguo blog. Faltan unos meses importantes, muy importantes, pero bueno... Ahora intentaré unirlo al actual La vida sigue igual pero, si no lo consigo y lo estropeo, por lo menos seguirá quedando esta parte: el Génesis.
Hoy puedo decir que ha sido como el Ave Fénix...
¡Suerte!...




Tenemos la mala costumbre de querer a medias,
de no mostrar lo que sentimos a los que están cerca,
tenemos la mala costumbre de echar en falta lo que amamos,
sólo cuando lo perdemos es cuando añoramos.
Tenemos la mala costumbre de perder el tiempo,
buscando tantas metas falsas tantos falsos sueños,
tenemos la mala costumbre de no apreciar lo que en verdad importa,
y sólo entonces te das cuenta de cuántas cosas hay que sobran.

Hoy te daría los besos que yo por rutina a veces no te di,
hoy te daría palabras de amor y las caricias que perdí,
cuanto sentimos cuanto no decimos y a golpes pides salir,
escúchame antes que sea tarde antes que el tiempo me aparte de ti.

Tenemos la mala costumbre de buscar excusas,
para no desnudar el alma y no asumir las culpas
tenemos la mala costumbre de no apreciar lo que en verdad importa,
y sólo entonces te das cuenta de cuántas cosas hay que sobran.

Tenemos la mala costumbre...

jueves, 1 de octubre de 2009

MELANCOLÍA



Hoy, al mirarme en el espejo, no me reconocí...
Estuve largo tiempo contemplando mi imagen reflejada y me pregunté: ¿Dónde está la mujer que recibió esta carta hace escasos meses?:


 
“Catedráticos y políticos intentan reclutarla en sus filas. Gentes de variado pelaje le confían sus laberintos más íntimos. Amistades de toda índole le señalan en vano libros para que reflexione. Hablando con ella se paran todos los relojes. Los operadores de telefonía móvil le estarán siempre agradecidos. Su hermana y su hija apenas dan un paso sin ella. Un tal Dany, de aspecto desvalido y mente torturada, se agarra al mundo a través de sus besos. Ella es Mar…, cuyo gancho para las personas y talento para las relaciones humanas están fuera de toda duda. Con ella ríe la vida y hasta los violines del otoño suenan menos tristes. Dice que está deprimida y por eso hay más que turbulencias en Wall Street. Ella es cálida, acogedora, desesperante, sus ojos son como los tesoros del Faraón y mirarla nunca da sueño, ha inspirado estas líneas que ya empiezan a temblar… Yo, miserable de mí, creo que no la necesito, pero… LA QUIERO”.

 
¿Dónde estás Mar?. ¿Qué te pasa?. ¿Por qué esa melancolía?. ¿Le echamos la culpa a la tristeza que produce esta estación del año?. El otoño. Los días son grises, las horas de luz se van acortando. Pronto el frío helará hasta el alma. ¿Son esas las causas de tu pesar inquieto y difuso que duele dentro y te acompaña?

¿Encontraré la respuesta en este poema de Antonio Machado?

Tarde tranquila, casi
con placidez de alma,
para ser joven, para haberlo sido
cuando Dios quiso, para
tener algunas alegrías...lejos,
y poder dulcemente recordarlas.

Es una tarde cenicienta y mustia,
destartalada, como el alma mía;
y es esta vieja angustia
que habita mi usual hipocondría.

La causa de esta angustia no consigo
ni vagamente comprender siquiera;
pero recuerdo y recordando digo:
-Sí, yo era niño, y tú, mi compañera.

Hoy, al mirarme en el espejo, no me reconocí...




jueves, 20 de agosto de 2009

RECORDAR ES VOLVER A VIVIR


El martes, 4 de agosto de 2.009, El Capitán Escarlata, un soldado intemporal, como él se define, dueño de una de las bitácoras más originales y mágicas que me he encontrado en la blogosfera, me dedicó su último poema antes de tomar unas merecidas vacaciones. Os invito a que la visitéis ya que allí encontraréis refugio y amabilidad. Su talento especial me conmovió desde el primer día que leí sus textos -con expresiones que te transportan al Siglo de Oro-. Tras darme permiso para que lo traslade a mi desván, quiero con él despedirme.
No cerraré la puerta del todo (prometido); la dejaré entreabierta para que podáis venir y escribir cuanto queráis, y yo os visitaré en vuestras casas y dejaré mi huella. No sé cuánto tardaré en recorrer esos rincones, pero siempre estaré con vosotros, antes o después, si me lo permitís. Mi correo electrónico también lo tenéis (para algún despistadillo/a que no lo haya visto en el perfil: ma.ba.pa@hotmail.com).
Las circunstancias hacen que tome esta decisión, decisión que más de uno/a sabía que llevaba tiempo meditándola.
Os echaré mucho de menos. Ya os echo de menos. Muchísimo. Y es por eso por lo que no voy a irme del todo.



Os dejo con el poema del Capitán. Los que lo conocen han comentado que nunca lo vieron tan tierno y que es un bello poema de amor... Vosotros decidís.
Me lo llevo en mi corazón, lo mismo que a todos y cada uno de los que habéis escrito -aunque sean dos palabras- en mi blog. El título que he puesto en esta última entrada es para deciros que, todos los buenos ratos que me habéis hecho pasar, los volveré a vivir una y otra vez, porque siempre os recordaré.


 


A mi Señora Mar,... por si muero mañana.

Glosa

Si supieseis, Agua de Mar,
que mañana haya de morir,
¿Que podríamos compartir?
¿Que es lo que os podría dar?

¿A que le daría valor?
¿En que mi mente soñaría?
¿Viviría enamorado del amor?
¿Que mano atraparía
con verdadero primor?
¿A quién he de levantar
del suelo donde ha caído?
¿A quién podría abrazar
en el lecho dormido?
Si supieseis, Agua de Mar.

Por lo que significan,
no por su mayor valer
las cosas se aprecian.
Que nuestra mano tender,
siempre del suelo levantan
almas para compartir.
Que estando acostado,
junto al ser querido dormir,
para no ser desagrado
que mañana haya de morir.

¿Soy de trapo marioneta
de vida por Dios regalada?
entonces como poeta,
pintaría la noche estrellada,
y un beso de rosa secreta.
En la cima quieren vivir,
los hombres del altozano,
sin saber que es subir,
a ser feliz más cercano
¿Que podríamos compartir?

Si supiera que mi aliento
una última vez fuera
a respirar su viento,
un beso más le diera
y me iría contento.
No se ha de esperar,
que mañana seguramente,
se podría lamentar
no preguntar a tu gente
¿Que es lo que os podría dar?
UN MILLÓN DE BESOS... HASTA SIEMPRE... ¡¡¡GRACIAS!!!

miércoles, 19 de agosto de 2009

QUE ME MIRE EL MAR. Poema dedicado de Mar Solana.

Mi sentir estival "Mar Adentro".


¡Que me mire el mar, que me mire…!
con su infinita tristeza,
con su feroz lejanía,
llanto silente que escucha
tu inquieta melancolía,
y ese rugir que me dice:
¡ven a mí… eres mía!

¡Que me mire el mar, que me mire…!
el crepúsculo llega a su cénit y
dibuja un cielo de grana y gualda…
mientras la mar sigue en calma
una gaviota, ¡su más fiel amigo!
su secreto exhala en malva.

Ya llega la noche
y el mar sólo espera
soñar con el alba,
la mañana y el día
el Sol y los niños,
sus cubitos roban de forma impía
lo que tú con un guiño
recoges para la orilla…

¡Cuántos misterios albergas!

¡Que me mire el mar, que me mire…!
la brisa me trae tu amor lejano,
mi amigo, mi hermano,
y acaricia mi rostro
queriendo imitar tus manos…
y el mar me susurra al oído:
¡ven a mí… eres mía!

Pues mi alma sin tu amor
es como la mar sin gaviotas,
y mi pelo sin tus manos,
es como un mar sin olas.
Quiero volar muy lejos,
Hacia cualquier lugar sin nombre…
Cualquier hermoso rincón
Que pinte de amor mis recuerdos.
¡Que me mire el mar, que me mire…!
ya está llegando otra noche y
la luna me está sonriendo,
tiembla este ambiente silente,
y sola me voy yendo,
más oigo una voz que musita:
¡mira… el mar ya te mira!

Escrito por Mar Solana en La Manga del Mar Menor (Murcia), el 2 de julio de 1985. Me lo dedica, junto a dos amigas, el 6 de Agosto de 2.009 en su blog Mar Adentro. Gracias, Mar.

lunes, 17 de agosto de 2009

REGALOS DEL VERANO DEL 2.009 Y REFLEXIONES.


Gracias mil, Ángeles, Angelet, Mar Solana, Nuria González.

MIRA en tu jardín las rosas entreabiertas, y nunca los pétalos caídos...
OBSERVA en tu camino la distancia vencida y nunca lo que falte todavía...
GUARDA de tu mirar los brillos de alegría y nunca las nieblas de tristezas...
RETÉN de tu voz carcajadas y canciones y nunca los gemidos dolorosos...
CONSERVA en tus oídos las palabras de amor y nunca las de odio...
GRABA en tus pupilas el nacer de las auroras y nunca tus ponientes lastimosos...
CONSERVA en tu rostro las líneas de las sonrisas y nunca los surcos de tu llanto...
CUENTA a los hombres el azul de tus primaveras y nunca las tempestades del verano...
GUARDA en tus mejillas solo las caricias disfrutadas, olvida las bofetadas recibidas...
CONSERVA de tus pies los pasos rectos y puros, olvida los caminos equivocados...
RECUERDA con placer tus escaladas, olvida las desilusiones del descenso...
RECUERDA los días en que fuiste agua limpia, olvida las horas en que te sentiste pantano...
CUENTA y muestra las medallas de tus victorias, olvida las cicatrices de las derrotas...
MIRA de frente el Sol que existe en tu vida, ignora la sombra que queda atrás...
La flor que se abre es más importante que mil pétalos caídos; Y solo un mirar de amor puede llevar consigo calor para entibiar muchos inviernos...
OPTIMISTA, y no te olvides que...
En la profundidad de las noches sin luna ¡es donde brillan mucho más las estrellas!

lunes, 3 de agosto de 2009

SOLA

Erich Fromm
Naces solo y mueres solo,
y en el paréntesis la soledad es tan grande
que necesitas compartir la vida para olvidarlo.

martes, 21 de julio de 2009

EL BONSAI


A ti,
que amas las plantas y un día me amaste a mí,
me acerco como este bonsai
orgullosa de no necesitar riego ni calor,
pero al que ojos misericordiosos como los tuyos
podrían mirar alguna vez,
mitigando su tremendo desamparo
ante la tarde que declina.

Si tú quisieras...



Algunas veces te veo
y pienso en mi boca y tu intención,
algunas veces intento
borrar de mi memoria tu traición.

Algunas veces mi cabecita
queda con nuestros recuerdos
a las cinco en el salón.

Y cuando te habla nunca se olvida
de guardarse sus cenizas
en mi pobre corazón.

No puedo olvidarte, no quiero esperarte,
no vuelvo a pedirme perdón.
No voy a negarte que sigo adelante,
no quiero verte mi amor.

No puedo olvidarte, no quiero esperarte,
ya no preguntes por mí.
Sólo quiero olvidar que un día te conocí.
Pero que hay días que toda la noche la paso llorando por ti.

Algunas veces recuerdo
que vivo a plazos por sobrevivir.
Algunas veces me cuento
que necesito un final feliz.

Algunas veces y aún todavía
se recogen las cenizas
de este pobre corazón.

No puedo olvidarte, no quiero esperarte,
no vuelvo a pedirme perdón.
No voy negarte que sigo adelante
no quiero verte mi amor.

No puedo olvidarte, no quiero esperarte,
ya no preguntes por mí.
No voy a negarte yo sigo adelante
no quiero verte mi amor.

No puedo olvidar no quiero esperarte
ya no preguntes por mí.
Sólo quiero olvidar que un día te conocí.
Pero hay días que toda la noche la paso llorando por ti.

Pero hay días que toda la noche la paso llorando por ti.